La evolución en los umpires del beisbol mexicano

TIEMPO EL RECUERDO: Regularmente acostumbramos decir que el beisbol sigue siendo igual, así es pero si hay muchas maneras de agregar cosas que parecen cambios. Simplemente se manifiestan las decisiones que van tomando los encargados de dirigir el beisbol. Sobre todo en el beisbol profesional y organizado.
Viendo un juego recientemente vinieron a la mente aquellos tiempos de los años 60 y 70. En este caso mientras veíamos un juego entre los Cañeros de Los Mochis y los Sultanes de Monterrey, observando el trabajo de los ampáyers cabe decir cómo han pasado los años parodiando esa hermosa canción que a la mayoría nos agrada. Sobre todo a los que ya hemos visto pasar muchos años.
Pensando en esos tiempos de los años 60 y 70 no hay duda que era otra época para los señores de azul. Consentidos por los directivos y la presidencia del circuito, jugadores y managers armaban todo un show protestando conteos y decisiones en las bases. Qué diferencia ahora que se revisan las decisiones apretadas y sin armar escándalos se aceptan lo que diga el ampáyer. Desaparecieron las viejas broncas. Chito García, Tomás Herrera, Napoleón Reyes, Wilfredo Calviño, "Papelero" Valenzuela, Cananea Reyes todavía alcanzó a ser protagonista de grandes broncas.
Antes de solicitar un lugar entre los ampáyers, estos necesitaban tomar un curso de boxeo o karate. Carlos Alberto González, Toño Páramo, Fernando Guerrero, Armando Rodríguez, Pepe Robles, Víctor Saiz, Cipriano Gaytán, Pepe Torres, Pepe Silva, Pancho Alcaraz, Claudio Solano que fue un gran bateador y luego se hizo ampáyer, Juan Lima, Manopas Alcantar, Alberto Ortega, etcétera.
Puede decirse que fue "Macacho" López quien puso la primera piedra protegiendo a los ampáyers. Como presidente de la LMP paró en seco a los managers y peloteros broncudos. Las multas eran de poco dinero y no pasaban de dos o tres días la suspensión para quien golpeaba a uno de los jueces. Pero el "Macacho" como presidente de la famosa liga invernal LMP puso en los estatutos que manager o jugador que golpeaba a un ampáyer, tan siquiera que le diera un empujón, quedaba suspendido por el resto de la temporada. Si eso sucedía en play off entonces se aplicaba la suspensión para la próxima temporada. Es decir que era una larga pena y entonces ya empezaron a meditar sobre esta condena. Antonio Ramírez Muro también se alineó y como presidente de la LMB aplicó la misma pena. Reforzada luego por Pedro Treto Cisneros.
Cuando jugaban los Tigres o los Diablos en el parque del Seguro Social, los aficionados asistían pensando en lo que harían esa noche Chito García y Tomás Herrera. Muchas veces vimos a Tomás Herrera y Chito García rodar por el terreno trenzado a golpes con el Zurdo Alcaraz, Juan Lima, etcétera.
Era la época que los ampáyers gustaban de hacer su show muy particular. Los aficionados disfrutaban ver a Juan Lima correr como avioncito y con ademanes afeminados. Cuando se cuentan estas historias los jóvenes de la actualidad no lo creen que eso haya pasado en nuestro beisbol profesional. Los panzazos de Napoleón Reyes fueron notables.
En la próxima edición de esta aportación mencionaremos a los ampáyers y sus ocurrencias en el terreno de juego. Seguramente muchos recuerdan a Toño Páramo, Jesús Monter, al ampáyer que narraba el juego, etcétera.
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