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Los inolvidables Sultanes de 1991

September 16, 2015

México, D.F. (Tomás Morales) 16 de septiembre.- Los Sultanes de Monterrey habían ganado su último campeonato en 1962, cuando debutó Héctor Espino en la Liga Mexicana y jugaban en el Parque Cuauhtémoc de gratos recuerdos, pero tuvieron que pasar 29 años para que conquistaran otro título, lográndolo en 1991 con el prestigiado Aurelio Rodríguez de manager y ya jugando en su nuevo y espectacular Parque Monterrey, rebautizado luego como "Palacio Sultán". Este sería el único campeonato logrado por Aurelio Rodríguez como manager en la pelota mexicana, tanto en verano como en invierno. Y la Serie Final se la ganaron a su gran adversario, Diablos Rojos del México, en siete juegos.

En 1991 los Sultanes lograron ensamblar un equipo que fue súper líder en la temporada normal con un récord de 82-38, que le dio una gran ventaja de 15 juegos y medio sobre los Tecolotes de los dos Laredos. Luego llegaron a la final venciendo en cinco juegos a los Charros de Jalisco y después, en una final norteña de sólo Monterrey, derrotaron a los Industriales en seis encuentros. Los Diablos Rojos llegaron a la final ganando a Leones de Yucatán y Bravos de León.

Para la temporada de 1991 la Liga Mexicana aumentó a 16 equipos con los regresos de los Cafeteros de Córdoba a la Zona Sur y Charros de Jalisco a la Zona Norte.

Los Sultanes se anotaron un éxito con la contratación de Darryl Motley, que había sido en 1985 uno de los grandes héroes de la Serie Mundial con los Reales de Kansas City en un triunfo en siete juegos sobre los Cardenales de San Luis. Motley, que bateó un jonrón decisivo en el séptimo juego de aquella Serie Mundial, tuvo una campaña de .339 con 26 jonrones y 103 carreras empujadas. Ese año de 1991 el campeón en cuadrangulares lo fue Roy Johnson, de los Piratas de Campeche, con 37 batazos de vuelta entera.

Los Sultanes tuvieron en Juan Reyes otro gran cañón y quien estuvo fenomenal en la serie final. El zurdo jonronero se la voló 26 veces ese año, su cifra más alta en la Liga Mexicana, y produjo 101 carreras con .305 de average. Entre Motley y Reyes dieron 52 cuadrangulares para los Sultanes. El boricua Germán "Deportivo" Rivera fue otra gran adquisición de Monterrey y al debutar en Liga Mexicana tuvo un porcentaje tan alto como lo pueden ser .385, con 25 jonrones y 99 carreras empujadas.

Fue, pues, una tercia de horror para los pitchers contrarios en toda la temporada. Orlando Sánchez, antes con Ángeles de Puebla, aportó .349 y 15 batazos de vuelta entera por lo que no hay duda que este equipo sultán contó con mucha dinamita. A esta lista hay que añadir al cañonero mexicano Antonio Aguilera, que dio una campaña de .306, 26 cuadrangulares y 61 carreras empujadas. Hasta el más chimuelo comía tuercas en este equipo Sultanes de 1991.

Juan Francisco Rodríguez hizo un gran trabajo en la segunda base y Remigio Díaz estuvo en sus juegos como shortstop en su segundo año de una larga carrera como titular de los Sultanes. Alejandro Treviño regresó a la Liga Mexicana tras varios años en Grandes Ligas y con el Sultanes campeón bateó .267 en 36 partidos.

En el pitcheo el máximo ganador lo fue el nativo de Monterrey, Alejandro Garza, con 13 victorias, con Aarón Acosta logrando 12 éxitos y Héctor "Caballo" Heredia fue un factor muy importante con 8-3 y 2.34. En ese 1991 regresaba Heredia tras unos años en las sucursales de los Dodgers de Los Ángeles en que se acercó a Ligas Mayores. Tomó parta en 24 juegos, ganando nueve y relevando en los demás. Era un pitcher de doble filo, como las hojas de rasurar. Roberto Osuna ganó ocho y el relevista Miguel Alicea de anotó 14 salvamentos en 32 juegos.

Ya en la final los Sultanes vencieron en siete partidos a un Diablos Rojos que manejó "Diablo" Montoya en sustitución de "Cananea" Reyes, que por esos días fue operado en la ciudad de México para tratar de salvarlo del terrible cáncer. Los Diablos ganaron el sexto juego para mandar la serie a un séptimo y decisivo encuentro y en esa victoria hubo un largo cuadrangular de Nelson Barrera, uno de los batazos más largos que se han dado en ese estadio.


FOTO: Roy Johnson y Aurelio Rodríguez (manager), parte de los Sultanes campeones.

Sultanes ganó por amplio margen el séptimo juego y se festejó un campeonato que no se tenía en la ciudad regia desde 1962. El nuevo Parque Monterrey se había inaugurado en el año de 1990 con la presencia del entonces presidente Carlos Salinas de Gortari en un día en que el Salón de la Fama tuvo por la tarde su fiesta anual.

En esta temporada de 1991 el campeón jonronero, Roy Johnson, se convirtió en, en ese momento, el segundo jugador en la historia de la Liga Mexicana en batear cuatro cuadrangulares en un juego. Fue el 24 de abril contra los Rieleros de Aguascalientes. El único juego sin hit ni carrera de la temporada lo lanzó Antonio Félix de los Diablos Rojos contra el campeón Sultanes de Monterrey.