LMB: Berzunza fue un gran bateador en verano e invierno
TIEMPO DEL RECUERDO: Muy seguido se dicen palabras cargadas de mucho sentimiento cuando alguien deja esta vida y hay razones para ello, pero en este caso diremos que William Berzunza fue una excelente persona y dejó huella como jugador. Este servidor lo recuerda con todos los atributos mencionados. Empezó a
TIEMPO DEL RECUERDO: Muy seguido se dicen palabras cargadas de mucho sentimiento cuando alguien deja esta vida y hay razones para ello, pero en este caso diremos que William Berzunza fue una excelente persona y dejó huella como jugador. Este servidor lo recuerda con todos los atributos mencionados.
Empezó a jugar en la LMB el año de 1957, precisamente en el año que los Leones de Yucatán ganaron su primer campeonato. No fue titular pero si parte de este equipo, ganó el primero de cuatro campeonatos alineando con el campeón. El segundo fue con el Águila de Veracruz en 1961 y el primero como titular de la primera base. También su primera campaña arriba de los .300 en bateo, promedió .311 haciéndose notar como un excelente chocador de pelota. Logró 9 de sus 18 temporadas arriba de la cifra mágica. Pero cabe decir que logró cuatro campañas superando el porcentaje de .270, lo que quiere decir que fue un bateador de mucha consistencia.
En 1964 ayudó para que los Diablos Rojos de México consiguieran su segundo campeonato, ese año bateo .316, sin embargo, logrando su mejor temporada al batear para .352 en 1965, al año siguiente lo enviaron a Reynosa demostrando que en cualquier parque de beisbol estaba listo para batear. Con los Broncos logró cuatro de cinco temporadas arriba de los .300. En su último año por el norte bateo .303 jugando para los Piratas de Sabinas y Saraperos de Saltillo.
No fue jonronero, apenas dio 26 en su carrera. En 1965 con los Diablos Rojos logró su mejor cifra al dar 10 en el parque del Seguro Social y produjo 87 carreras, también su mejor temporada. Fue un gran bateador sin duda alguna. También se lució en la LMP cuando todavía se llamaba Liga Invernal Sonora-Sinaloa. Se le recuerda con los Cañeros de Los Mochis y los Yaquis de Ciudad Obregón. También fue bateador de .300. Cuatro temporadas bateo sobre .300, tanto así que después de la campaña 1970-71, Berzunza y Espino era los dos únicos bateadores de por vida que estaban arriba de los .300.
Todos estos datos hacen recordar que por querer ayudar perdió los .300 de por vida. Ya estaba retirado en la LMB y hacía labores de coach de primera base con los Leones de Yucatán, que estaba bajo el mando de Carlos Paz. Pero llegaron a Tabasco para jugar serie y el equipo estaba lleno de lesionados. Berzunza le dijo a Paz que lo diera de alta por si se necesitaba un bateador emergente. Paz lo tomó en cuenta y lo necesitó como bateador emergente, Berzunza tomó un bat y sacó un elevado a segunda. Berzunza se había retirado bateando .300 y con ese turno bajó a .299 y así quedó porque no volvió a tomar otro turno al bat, se aliviaron los lesionados y Berzunza siguió como coach de primera.