Ramón Mendoza, pelotero inolvidable en su tierra
8TIEMPO DEL RECUERDO: En cada lugar de nuestro país siempre surgen historias de jugadores que se identificaron con los aficionados. Sobre todo en los estados y pueblos donde el beisbol es su deporte favorito. En esta ocasión vamos a recordar aquellos años que surgieron jugadores en la beisbolera ciudad de
8TIEMPO DEL RECUERDO: En cada lugar de nuestro país siempre surgen historias de jugadores que se identificaron con los aficionados. Sobre todo en los estados y pueblos donde el beisbol es su deporte favorito.
En esta ocasión vamos a recordar aquellos años que surgieron jugadores en la beisbolera ciudad de Saltillo. Uno de ellos Ramón Mendoza, en los primeros años de practicar el beisbol que lo llevó a tener un nombre distinguido en su estado y también a nivel nacional. Fue segunda base pero también jugó como tercera base. El mismo relata lo que sucedió aquellos años. Poco antes de fallecer encontró eco en los medios de comunicación y relató parte de su vida en los diamantes beisboleros.
Recordó que llegó al Ateneo Fuente, que estrenaba su bonito edificio y a sus maestros como el ingeniero Carlos Martínez. En la práctica del beisbol conoció y fue su maestro Abraham Curbelo, un cubano que jugaba la posición de short stop. Llegó a Saltillo, le gustó y aquí se quedó para siempre.
Mendoza jugó con equipos de tercera fuerza para irse formando, siguió avanzando en categoría de equipos, así llegó a jugar con el equipo de Luz y Fuerza que dirigía Ramón Jasso. Ya tenía categoría de beisbolista profesional. Su esposa Estelita y sus 8 hijos fueron parte importante de sus triunfos en el beisbol. Varios de sus hijos jugaron beisbol siguiendo sus pasos. Con este equipo se encontró a muy buenos jugadores, entre ellos “Popeye” Alvarado, Arnulfo Flores padre, Jesús “Chino” Luna, José Isabel Lara, Guillermo “Flaco” Narváez, “El Músico” Estrada, etcétera.
Ramón Mendoza recuerda su primer juego nocturno, fue en el año de 1939, instalado por don Arnulfo Flores. Empezó el juego contra el Ateneo Fuente. Un juego de exhibición que se suspendió por algo que nadie puede imaginarse. Regularmente es por oscuridad, lluvia o falla en el alumbrado. En este caso si tuvo que ver el alumbrado. El hombre que lo instaló trabajó como ampáyer por la primera base y resulta que el pitcher Nacho Castañeda que por cierto tiraba duro, hizo una revirada a primera base pero la bola le pegó en la frente a don Arnulfo Flores y el juego no pudo continuar por la gravedad del bolazo.
De este equipo saltó a la LMB para jugar con el Unión Laguna que era dirigido por el gran cubano Martín Dihigo. Quien los llevó al campeonato. Para esto Ramón Mendoza ya tenía un nombre bien fincado y una carrera de logros. Ahí conoció a su gran amigo Alejandro Crespo, también tuvo de compañero a Jesús “Chanquilón” Díaz que tuvo una gran campaña y fue el Novato del Año. Memo Garibay fue parte del cuerpo de jardineros en este equipo aparte de otros famosos que ya lo eran en la LMB.
Ramón Mendoza también tuvo acción en la vieja Liga de la Costa, entre otros equipos jugó para los Venados de Mazatlán. El nombre de Ramón Mendoza quedó grabado en la mente de jugadores y aficionados saltillenses.